El impacto medioambiental de la gestión de residuos ya no es sólo un problema de los países desarrollados, también los países en vías de desarrollo se están concienciando del impacto que la mala gestión de los residuos supone no sólo para el medioambiente, también para la salud de las personas y para la economía de sus países.
América Latina no es una excepción y la necesidad de encontrar soluciones efectivas se ha vuelto urgente en la región y abordar estos desafíos desde una perspectiva económico-financiera se vuelve fundamental.
Los vertederos limitan el crecimiento y la planificación urbanística de las ciudades
Una de las razones clave para actuar con urgencia en la gestión de residuos es la falta de espacio necesario para el crecimiento de las ciudades.
El crecimiento de la población, con altas tasas de natalidad en los países en vías de desarrollo, los movimientos migratorios de zonas rurales a zonas urbanas, y la falta de planificación en el crecimiento de la ciudades, están llevando a que las áreas residenciales alrededor de las grandes ciudades se acerquen cada vez más a los vertederos abiertos, donde tradicionalmente se arrojaban los desechos y donde no se han implementado procesos de recuperación de estos residuos.
Si bien estas prácticas se consideran obsoletas en los países desarrollados, existen todavía grandes vertederos abiertos cerca de áreas urbanas en muchos países latinoamericanos.
Además del problema que suponen desde el punto de vista ambiental, representan un riesgo para la salud de las personas ya son caldo de cultivo para el desarrollo de plagas, insectos y roedores que transmiten todo tipo de enfermedades.
El coste de transformar los vertederos a cielo abierto
La eliminación o transformación de estos espacios en centros de gestión de residuos, supone también un reto económico al que los países deben hacer frente:
- Costos de adquisición de terrenos: La falta de terrenos adecuados y disponibles para establecer vertederos o instalaciones de gestión de residuos los hace difícil y costosos de adquirir.
- Costos de infraestructuras e inversión en tecnología: Es necesario invertir en infraestructuras y tecnologías, que permitan transformar los vertederos en centros de separación, gestión, tratamiento y reutilización de estos residuos.
- Incremento en el coste del transporte de los residuos: Los residuos deben ser transportados a los centros situados a mayor distancia, debido a la falta de terrenos cercanos a las áreas urbanas. Esto implica mayores costos de transporte, incluyendo combustible, mantenimiento de vehículos y mano de obra, lo cual representar una carga económica adicional para los gobiernos locales o las empresas encargadas de la gestión de residuos.
Oportunidades alrededor de los centros de gestión y transformación de residuos
Las inversiones en gestión de residuos han demostrado ser una inversión rentable no sólo por la reducción del impacto ambiental, sino por el ahorro de costes y la generación de ingresos derivados de la gestión correcta de los residuos.
Incremento del turismo:
Cada vez existe un número mayor de personas comprometidas con el medioambiente y la sustentabilidad, esto es especialmente notorio en los hábitos de consumo, principalmente de las nuevas generaciones, que premian las empresas con políticas medioambientales.
El turismo no es una excepción y tanto hoteles como destinos turísticos amigables con el medioambiente son cada vez más demandados. Esto resulta especialmente relevante en los países de la región con altas tasas de turismo internacional.
Es destacable el caso de Costa Rica que ha logrado reconocimiento mundial por su enfoque en la conservación del medio ambiente y la promoción del turismo sostenible, enfocándose en cuatro pilares:
- Conservación de áreas naturales: Estableciendo una extensa red de parques nacionales y reservas para proteger su biodiversidad. Estos espacios naturales brindan a los turistas la oportunidad de experimentar una amplia variedad de ecosistemas naturales, como bosques tropicales, volcanes, playas y manglares.
- Turismo sostenible: La mayor parte de los operadores turísticos en Costa Rica se han adherido a prácticas sostenibles, como la gestión eficiente de residuos, el uso de energías renovables, la conservación del agua y la participación en proyectos de conservación local.
- Aventura y ecoturismo: Costa Rica ha promovido activamente el ecoturismo y el turismo de aventura, con una amplia gama de actividades de contacto con la naturaleza.
- Certificaciones y reconocimientos: El país ha obtenido el galardón de «Mejor Destino Verde del Mundo» en diferentes ocasiones y cuenta con certificaciones internacionales como el Programa de Certificación para la Sostenibilidad Turística (CST).
Ingresos por generación de energía:
El precio de la energía es otro factor que impulsa la necesidad de una gestión efectiva de los residuos que representan una oportunidad, económicamente atractiva, de ser utilizados como fuentes alternativas al uso del petróleo o el gas.
Un claro ejemplo de cómo un centro de procesamiento de residuos puede generar beneficios económicos, es la planta de valorización energética de Kwinana, en Australia Occidental, donde se procesan alrededor de 400,000 toneladas de residuos sólidos urbanos al año, generando 36 megavatios de electricidad por un valor de millones de dólares.
Esta planta utiliza la tecnología de conversión de residuos en energía (Waste-to-Energy, WtE) para tratar los residuos municipales y convertirlos en electricidad y calor.
Venta de materiales reciclados:
Más allá de las empresas que reciclan materiales, de uso cotidiano como papel, cartón, plástico, vidrio… para transformarlos y darles una nueva vida, cada vez encontramos mayor número de empresas que se especializan en la gestión de determinados tipos de residuos como electrónicos o procedentes de la construcción, que han demostrado su viabilidad.
La planta de Schwedt, en Alemania, procesa alrededor de 200,000 toneladas de residuos de construcción y demolición al año. Residuos procedentes de la construcción se procesan y transforman en materiales reciclados, como grava, arena u hormigón, que pueden volverse a utilizar en el proceso de construcción de nuevos proyectos.
Generación de empleo:
La operación de los centros de residuos requieren de personal especializado por lo que son generadoras de empleos directos e indirectos.
Un ejemplo en la región de una planta de gestión de residuos, es el Complejo Ambiental de CATE en la Ciudad de México. Es un complejo de de tratamiento y disposición final de residuos sólidos que opera bajo el principio de la gestión integral y sustentable de los residuos y que se estima que genera alrededor de 400 empleos directos.
Gestión de residuos como punto de partida hacia el desarrollo sostenible
Se ha contrastado que una mala gestión de los residuos tiene un impacto negativo en el medio ambiente, contribuyendo a la emisión de gases de efecto invernadero, así como los efectos que genera en la salud del ser humano.
Sin embargo, una gestión adecuada de los mismos representa una oportunidad, no sólo de mitigar este impacto, sino también de tener un impacto positivo en desarrollo económico y social, para empresas, gobiernos y sociedad.
La región está repleta de vertederos a cielo abierto, se estima que sólo en México y Brasil existen alrededor de 6000, 2500 en Argentina, 3.700 en Chile, 1660 en Perú, 520 en Colombia…
Afortunadamente, la mayor parte de los gobiernos están iniciando proyecto de transformación de estos vertederos a cielo abierto que deberían ser vistos no sólo como un problema a resolver, sino como una oportunidad a aprovechar como base para el desarrollo sostenible de la región.